Escuela Técnica Superior de Ingeniería
Agronómica, Alimentaria y de Biosistemas

7-1-2020

La Universidad Politécnica de Madrid (UPM) ha concedido a Teresa Briz, profesora de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Agronómica, Alimentaria y de Biosistemas (ETSIAAB), el Premio a la Innovación Educativa 2019. Se trata de un galardón que distingue al docente que ha desarrollado en los último cinco años las mejores actividades en este campo. Briz, que pertenece al Departamento de Economía Agraria, Estadística y Gestión de Empresas, se muestra “muy contenta” por este premio “con el que se reconoce el trabajo realizado por y con los alumnos de la ETSIAAB en proyectos de innovación docente”. Lo recogerá el día 28 de enero en el acto de la festividad de Santo Tomás de Aquino.

¿Qué papel desempeña la innovación educativa en la mejora de la enseñanza?

Hay que adaptarse a los nuevos tiempos sin perder las virtudes de la docencia clásica y, en mi opinión, las clases magistrales siguen siendo el pilar de la enseñanza. Los alumnos que llegan hoy día a la universidad están acostumbrados a aprender de forma diferente y, para que lo que enseñamos resulte atractivo, hay que plantearse algunos cambios. En mi caso, he centrado los esfuerzos en la internacionalización de las enseñanzas. He llevado a cabo actividades y participado en proyectos para que los alumnos estén expuestos a otras culturas que son otras formas de aprender.

¿Cómo reciben los alumnos estas propuestas?

Muy bien. Suelen estar muy motivados y participan sin dudarlo. Las nuevas generaciones tienen que ser estimuladas de acuerdo a su mentalidad y es tarea de los profesores, siempre que sea posible, acceder a estas nuevas formas de enseñanza que estimulen a los alumnos. También depende de las asignaturas que se impartan, pues algunas permiten más flexibilidad que otras. Por ejemplo, hay una creciente conciencia ecológica dentro del marco de los Objetivos de Desarrollo Sostenibles, muy impulsados desde el Centro de Innovación en Tecnología para el Desarrollo Humano (itdUPM), y los alumnos debaten las distintas ideas cuando se les plantean casos de estudio, llevan a cabo trabajos colaborativos y se esfuerzan en ser creativos con las propuestas.

Teresa Briz

Ha coordinado proyectos relacionados con la agricultura ecológica ¿Cómo resultó la experiencia?

Desde que realicé mi tesis doctoral hace ya años, el sector ecológico siempre me ha interesado y he realizado actividades muy variadas sobre estos temas: colaboración en la Semana de la Ciencia, gestión del huerto didáctico ecológico (que, por cierto, todos los años cuenta con becarios), inclusión de la UPM en la red europea ENOAT (European Network of Organic Agriculture Teachers) y proyectos innovadores docentes. He participado en los proyectos de innovación educativa de la UPM, proyectos de la Comisión Europea (incluido el primer proyecto Erasmus + concedido a la UPM) y un proyecto educativo financiado por el Departamento de Agricultura de EE UU. En todos estos proyectos, los alumnos tienen un papel fundamental: han llevado a cabo tareas como recopilar información, realizar encuestas y redactar informes, han participado en actividades online con alumnos de otras universidades europeas, han viajado a seminarios y congresos internacionales para realizar las presentaciones que ellos habían preparado, han colaborado con empresas y les han propuesto posibles mejoras en sus actividades, han ido a colegios de enseñanza secundaria a explicar lo que ellos entendían por sostenibilidad, entre otras acciones.

También ha participado en proyectos de la modalidad aprendizaje y servicio sobre huertos y naturación urbana.

Así es, los alumnos se implican en actividades con distintos actores de la sociedad (asociaciones, empresas, ONG, etcétera), comprenden las necesidades y los problemas que se plantean y proponen alternativas. El resultado siempre ha sido muy positivo.

Esta entrevista forma parte del número de diciembre de 'Savia', el boletín de la ETSIAAB.